lunes, 20 de julio de 2015

Crisis en Palacio

A pocos días de la elección de la mesa directiva, el presidente Humala, Fredy Otárola y Josué  Gutiérrez se encuentran en uno de los ambientes de Palacio de Gobierno.

-Bueno, señores, nos hemos reunido para hablar sobre la presidencia del Congreso. Alguien quiere empezar. A ver, Josué, ¿nos pones en autos?
-¿Cómo? ¿Ya se van? Si acabamos de empezar.



-No Josué –intervino la primera dama-. Ollanta te pide que nos pongas al tanto de cómo van las cosas.
-Ah ya, entiendo. Miren, la situación es la siguiente: Apristas y fujimoristas van a apoyar a Iberico.
-¿Y Vitocho? –preguntó Humala.
-No, no creo que Vitocho apoye a Iberico.
-Te estoy preguntando quién apoya a Vitocho.
-Ah bueno, no sé con exactitud pero tampoco podemos descartarlo del todo.
-¿Y nosotros cómo vamos?
-Bueno, podríamos estar mejor.

Humala mira a Nadine y ella se alza de hombros.

-¿Qué significa eso Josué? Se supone que tú eres el vocero de la bancada. Hablemos claro. ¿Cuáles son nuestras posibilidades de ganar?

Josué pasa saliva, alza las cejas y gesticula.

-Todavía no hemos perdido la elección.
-¿Lo dices porque tienes alguna esperanza de ganar?
-No, lo digo porque es la verdad. Todavía no hemos perdido la elección.

Humala y Nadine miraron a Otárola que había permanecido en silencio.

-Bueno, no les voy a negar que la situación es sumamente crítica –dijo Otárola-. Es importante mantener la presidencia del Congreso porque hay cosas importantes que se van a ver, como por ejemplo es el caso de la Comisión de Belaúnde Lossio.
-Vamos Freddy –dijo Nadine, con fastidio- ¿Vas a decirnos las cosas que todos sabemos? Para tal caso seguimos escuchando a Josué. Lo que necesitamos son  sugerencias para ganar la presidencia.
-Bueno, si eso quieren ahí les va mi sugerencia. Hay que convocar  a la vicepresidenta.
-¿Llamar a Marisol? Olvídalo. ¿Alguna otra idea?

Otárola negó con la cabeza y lanzó una mirada suplicante a Humala.

-Vamos Nadine –dijo Humala-. Piénsalo. Sería una buena decisión. Con Marisol podríamos recuperar varios votos.
-Es lo más seguro –dijo Freddy.

Luego Humala miró a Gutiérrez.

-Josué –dijo- A ver, ¿cuántos votos crees que podríamos recuperar si lanzamos a Marisol?
-Eso depende, ¿desde dónde van a lanzarla?

Otárola movió la cabeza.

-Vamos Josué, tampoco tienes que hablar así de ella.
-Pero es que no puedo creerlo. ¿En verdad van a lanzar a Marisol como candidata? ¿En serio?
-Ya ven –dijo Nadine-. Hasta Josué sabe que eso no puede ser.
-Claro que no –dijo Gutiérrez- Se supone que el candidato sería yo.
-A ver, a ver, ordenémonos –dijo Humala-. Es vital que mantengamos el control del Congreso. Freddy propuso a Marisol y creo que no es una mala idea.
-Pero yo creo que es una idea pésima así que olvidémonos de eso. –dijo Nadine.
-Pero Nadine….
-Pero nada Ollanta. Además, te aseguro que ella misma no aceptaría.
-En eso puede que tenga razón –dijo Otárola-. El año pasado la trataron tan mal. Le dieron la espalda para apoyar a Ana María.
-Ni me hagas acordar –dijo Humala-. Nos equivocamos de lejos con ella. Peor imagen no ha podido dar.
-Ella lo único que ha hecho es velar por nuestros intereses –dijo Nadine-. Así que no voy a dejar que la critiquen así.
-Exacto, yo opino lo mismo que la primera dama –dijo Gutiérrez- Que Ana María haya sido la peor presidenta del Congreso, sí ¿y qué? Que haya logrado niveles de incompetencia nunca antes visto, sí ¿y qué? Que ha dado vergüenza ajena varias veces…
-Ya Josué, mejor déjala de defenderla.
-Bueno –dijo Humala- nos urge tomar una decisión.
-Estamos contra el tiempo –dijo Otárola.
-Señor presidente, señora primera dama –dijo Gutiérrez-. Les aseguro que si me nombran como candidato para la presidencia del Congreso no se van a arrepentir.
-¿Quiénes no se van a arrepentir? –dijo Otárola- ¿Nosotros o la oposición?

Por un momento, se instala un silencio en el lugar.

-¿Y Nadine? –dijo Humala de pronto-. ¿Qué dices? ¿Nos la jugamos con Josué?

La primera dama demoró unos segundos antes de responder.

-Bueno, nunca pensé decir esto, pero habrá que hacer el intento. Josué…
-Sí, dígame –dijo Gutiérrez emocionado.
-¿Todavía tienes el número de Marisol?


Publicado en la revista Velaverde N°124

No hay comentarios:

Publicar un comentario